Vivimos rodeados de basura. Basura que generamos cada uno de nosotros, algunos mucho mas que otros. Esto que denomino basura tiene su vertiente material (excrementos, restos, embalajes, subproductos, residuos y otras contaminaciones) que por lo general no son precisamente "sanos" para nuestra querida Tierra.
Pero como seres depredadores y destructores de su propia especie, no nos satisfacemos con matar a nuestro semejante indirectamente a través de este tipo de contaminación. Somos mucho mas pérfidos, lo hacemos directamente a través de los puños, armas y otros inventos o de manera mas sofisticada, que es la que esta de moda y esta socialmente valorada. Esta ultima categoría de asesinato es de la que quiero tratar.
A los que perpetran este tipo de actos (se podrían denominar asesinos del alma), es lo que llamaré a partir de ahora "basura". Los cruzamos cada día y cada instante, muchas veces dormimos con ellos, compartimos mesa, festejamos, nos abrazamos y hacemos el amor, sin saber que en realidad se trata de seres de otra especie. No son realmente humanos. Robarían a su padre por un televisor gigante, o traicionarían a un "amigo" por unos cuantos euros, o abandonarían a la persona con quien comparten todo por un orgasmo.
(seguirá)
Major Tom
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